Dos semanas después de que Estados Unidos estableciera un nuevo proceso migratorio, cientos de venezolanos quedaron varados en Costa Rica, en donde sobreviven con las ayudas que les dan en albergues en San José.
Alexander Principal, de 23 años, es uno de los tantos venezolanos varados. El joven ingresó de forma irregular a Costa Rica tras cruzar la peligrosa selva del Darién, pero vio interrumpido su viaje a Estados Unidos por el nuevo proceso migratorio.
“Yo llegué hasta aquí justo cuando empecé a ver en las redes que estaba un poquito complicada la situación en la frontera de Estados Unidos”, dijo Principal a la Voz de América.
El joven explicó que miles de venezolanos quedaron varados en Centroamérica, de los que cientos duermen en las calles de Costa Rica. Por tanto, deben sobrevivir por la ayuda que les brinda la Asociación Obras del Espíritu Santo y otras organizaciones.
AYUDA A LOS MIGRANTES
Principal, quien consiguió un trabajo a medio tiempo, comenzó a ayudar en obras benéficas para otros venezolanos varados. Al respecto, precisó que entregan casi 300 platos de comida para los migrantes.
“Ahorita estoy durmiendo en el área de la calle, afuera de la asociación, porque me dolería dormir bajo techo mientras otros están a la intemperie”, explicó Principal.
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Ricardo Maliaña, originario del estado Trujillo, estuvo radicado en Colombia dos años, pero decidió migrar hacia Estados Unidos. “Decidí venirme para acá al sueño americano, al famoso sueño americano, como todos mis compañeros, pero todo fracasó”, lamentó.
Estados Unidos anunció que expulsará a los venezolanos que ingresen por pasos irregulares, algo que tomó desprevenidos a miles en Centroamérica. Por tanto, algunos intentan regresar a Venezuela, mientras que otros están varados por la falta de recursos económicos.
